Compartir desde el Corazón: Entrevista a Álvaro Congrains

  • Nombre: Alvaro Congrains Maeshiro
  • Disciplina de Yoga: Vinyasa.
  • Una postura de Yoga: El cuervo, es una de las primeras posturas de balance que me salió.
  • Algo que disfrute hacer en sus tiempos libres: Ver películas, leer, correr tabla.
  • Un libro que recuerde mucho: “El Poder del Ahora”de Eckhart Tolle.

 

Álvaro tomó su primera clase de yoga hace 5 años por invitación de una amiga de la Palestra en la universidad. Recuerda que aquella vez se sintió atraído por el yoga debido a que para él conectaba un aspecto físico y espiritual lo cual hace a la disciplina milenaria proveniente de la India distinta a otras.

Sus primeras clases fueron en Lima Yoga en Surco, “iba a las clases de Hot Yoga, me encantaban. Luego me enamoré de la profesora de yoga y salí con ella por dos años y a través de esa conexión con ella me metí más en el yoga”. Además, en esa época su día a día transcurría en las aulas de la Universidad Pacífico, donde estudió la carrera de Administración.

[…] la mejor práctica de yoga es mantener la presencia, el aquí y el ahora.

 

 

 

¿Cómo fue esa primera clase de yoga?

Álvaro: ¡Difícil!, pensé que iba a ser muy fácil [risas]. Fue retador y después de la clase terminé muy relajado. Dije, “bueno, me puedo ejercitar y terminar relajado, conozco gente buena onda” y eso captó mi atención.

Así mismo considera que el concepto de yoga puede ser tan diferente, y una de las cosas que ha mejorado en su aspecto personal es “darme cuenta que la mejor práctica de yoga es mantener la presencia, el aquí y el ahora y poder, con esa presencia, afrontar los miedos de uno; personas en la familia con los que uno tiene que lidiar y no perder la paciencia o poder hacer cosas que no te gusta pero que tienes que hacer”

 

DEL ALUMNO AL PROFESOR

Nos cuenta que luego de 1 año de haber iniciado las clases regulares le ofrecieron la oportunidad de ser intérprete en el Profesorado que dictaría Ruslan teriler, “entonces el profesorado a mí me llegó de regalo. Sentí que si me llegaba de esa manera era por algo”.

¿Cómo decidiste ser profesor de yoga?

Es como si hubiese estado sediento en un desierto y me hubieran proporcionado una fuente de agua para beber y naturalmente he seguido bebiendo de esa fuente e invitando a más personas a que puedan beber de esa fuente. La fuente es inagotable, es el universo, es Dios mismo o como queramos llamarlo. Cada vez que estoy en contacto con esa fuente me doy cuenta de lo importante que es compartir.  Lo esencial que es.

Nos comenta que cuando viajó a México, alguien le dijo algo muy bonito: ‘si uno tiene un don tiene que compartirlo porque si no le hace daño a uno’, “entonces yo creo que este camino es un camino solitario en el sentido que uno trabaja con tus propios temas, tu mente”, señala Álvaro.

“Con una pequeña acción puedes generar una serie de eventos que terminan por generar más paz en las personas”, añade.

 

 

 

¿Qué retos o temas has trabajo como profesor?

El reto que Álvaro plantea como número uno es ser consecuente, “no puedo enseñar si yo no practico. Solo puedo enseñar lo que practico, eso ha sido bastante aprendizaje de ser humilde, de no querer ser el mejor, de ser yo mismo al momento de enseñar”. Además, señala que hay un estereotipo de ser profesor y no es necesario cargar esa caja que nosotros mismos nos hemos creado.

“El verdadero profesor comparte cuando conecta desde el corazón y no desde la mente”.

 

 

¿Cómo sería esa caja?

El yogui súper flexible que se para de cabeza, que es perfecto, al que tú siempre puedes acudir porque está en un estado de ecuanimidad total y está meditando las 24 horas del día. Hay una imagen de profesor de yoga que no necesariamente es. El profesor solo está ahí para compartir lo que sabe, lo que practica. Si no practica está enseñando del manual. El verdadero profesor comparte cuando conecta desde el corazón y no desde la mente. Pero el error del instructor, me gusta más el término instructor, es no practicar lo que enseña. Punto dos, no tratar de aparentar y esto abre un campo infinito de posibilidades desde el cual puedes ayudar a otra persona.

Pero su aprendizaje espiritual no acaba con el profesorado, él continúa descubriendo nuevas formas de entrar en conexión que le han permitido realizar cambios importantes en su vida. “Hace medio año que escuché la práctica de cantar mantras y la incorporé. La razón de ser es que los mantras o vibraciones te llevan a ese espacio de paz. Están escritos en los textos védicos antiguos, que los mantras son los nombres de dios o los nombres de los lugares de paz, entonces mientras más conectes con esa vibración vas a poder estar en ese estado de paz”. Él señala que es como cuando uno repite todos los días “soy feo”, “soy gordo”; son mantras, son vibraciones. Entonces es elegir qué vibración quieres para tu vida. Muy poderosos cantarlos y mejor si es en público.

“Tenemos que aprender a soltar y que toda esta práctica de yoga no endurezca nuestro corazón, sino que lo ablande”.

 

 

–  Nos llamó la atención una frase que colocaste en tu red social, “vinimos a este mundo a jugar, en un mundo de adultos hace falta coraje para vivir como niños” …

La aprendí de una señora que conocí en Japón, yo la llamo mi mamá cósmica. Ella me dijo la primera parte de la frase “vinimos a este mundo para jugar” así a la ligera y se quedó grabada en mi mente. Lo que sigue lo agregué yo. Punto uno, el coraje es algo muy importante, y no me refiero a aquel coraje que tengo para cumplir mis metas; este es un coraje para soltar sin tener miedo a ser herido. Un coraje a mostrarte vulnerable. El coraje de sacarte las máscaras. Cuando nos empapamos de este coraje real es cuando nos volvemos niños, porque quién es más vulnerable que un niño. Él por su naturaleza se muestra tal y como es. Tenemos que aprender a soltar y que toda esta práctica de yoga no endurezca nuestro corazón, sino que lo ablande.

¿Sientes que has roto muchas máscaras con la práctica?

¡Oh, sí! poco a poco siento como se van desprendiendo y se va ablando mi corazón. Cuando uno se pone en una situación vulnerable y te muestras como eres, le abres la puerta a otro para se muestre tal y como es.

OPENYOGA

¿Cómo nace OPENYOGA?

Nace en el tiempo de los huaycos en el Norte del país por el Fenómeno del Niño, en ese momento había dejado de dictar clases en un estudio y se me ocurrió hacer un evento pro fondos, invitando a mis amigos a hacer yoga en el Faro del Malecón. Me sorprendió porque llegaron un montón de personas así que volví a hacer otro evento y ocurrió lo mismo. Entonces dije “Wow, podría dictar aquí” y así empecé a dictar dos clases por semana. Al inicio se llamaba Free Yoga Perú porque la idea se basaba en los Free Walking Tour que hay en otros países. Después de unos meses decidí cambiar el nombre a OPEN porque sentí que el Free me limitaba.

Open de apertura y open porque estamos abiertos a diversas prácticas, no solo al yoga; por ejemplo, meses después de un viaje a México conocí a una señora que trabaja medicina ancestral y la traje a Perú a nombre de OPEN para dictar algunos talleres. Open a la apertura de generar comunidad, de no limitarnos a un yoga sino que el estado de presencia lo podemos alcanzar a través de diferentes prácticas. Poco a poco las cosas se fueron dando más rápido de lo que hubiera imagino.

¿Cómo imaginas el futuro con OPEN YOGA?

Veo una comunidad muy entrelazada y alineada, por dentro y por fuera. Me gustaría contar con un espacio cerrado en el que las personas que tengan más interés en profundizar su práctica puedan encontrarse, o un lugar para cuando venga el invierno. Impulsar el crecimiento de cada uno y ese compartir continuo, organizado y exponencial con la comunidad; en una retroalimentación a nivel interno y externo que se vaya manifestando en diferentes parques, espacios, profesorados e incluso a través de plataformas digitales. Empezar a trabajar con personas como Leonie de Con.Pazion, estoy muy llamado a hacer algo con niños, yoga y educación; no sé qué exactamente, pero estoy seguro que de acá a algunos años estaremos haciendo algo.

Open Yoga Perú: https://www.facebook.com/OpenYogaPeru/

 

||| Entrevista realizada por: Claudia Chalán Ayala, Comuniaciones. Redacción: Carolina Chumpitaz – lāal.